martes, 11 de agosto de 2009

Capitulo 6: Y con nocturnidad y alevosia

Llegué a casa sobre las 12. Esa mañana en Recursos Humanos yo sólo repasé anatomía de Robert Pattinson, y en Seguridad Social me centré especialmente en su boca, sus labios, su lengua, su textura, su sabor, su aliento, su calor…sus besos...En pleno invierno la mitad de la ropa me sobraba. No me había concentrado en otra cosa en toda la mañana. Reviviendo una y otra vez lo anoche acontecido.
Cuando el profesor había acabado la clase, y la mitad de mis compañeros ya habían desaparecido, yo seguía sentada, mirando al encerado. Agnes había tenido que avisarme de que la clase estaba prácticamente vacía.
Ya en casa mi mente seguía volando por los mundos de Rob…Esto no tenía que ser nada sano.
Sacudí la cabeza y me centré en preparar la comida.
De pronto sonó el timbre.
Abrí.
-¡Hola! ¡Buenos días!- Rachel entró, sin que nadie se lo ofreciese, con una gran sonrisa y gafas de sol. ¿Gafas de sol, en febrero, en Londres?. Joder, menuda juerga se habían pegado.
-Hace ya un rato que es de día, cielo. Bonitas gafas, por cierto.- Elevé las cejas.
-He dormido una hora y media…Y ahora tengo comida familiar…-Se tiró en el sofá, tapándose la cara con un cojín.
-¿Y qué haces aquí?- se quitó el cojín de la cara y me miró excitada.
-Buuuueno…No fui yo a la que Robert Pattinson llevó a casa anoche…-Se quitó las gafas y me guiñó un ojo.
-Joder que ojeras…
-Zorra.- Se las volvió a poner, mientras yo sonreía.- ¿Y bien?
-¿Y bien?-enarqué las cejas y giré la cabeza a un lado.
-¿Que qué paso?. ¿Hablasteis?, ¿lo arreglasteis?.-Iba alterándose a cada pregunta. Suspiré.
-Lo hablamos y lo arreglamos, sí.-Asentí, esperando que eso le fuera suficiente. Se incorporó emocionada. No lo iba a ser.
-¿Y qué?. ¿Pasó algo más?- preguntó moviendo las cejas. Esperé un segundo. ¿El beso más maravilloso del mundo cuenta?.
-No.- Mentí. Su cara adquirió un gesto de decepción, mientras me observaba detenidamente.
-Espero que eso sea verdad. Porque como haya pasado algo y yo no sea la primera en saberlo, te estrangulare con estas preciosas manos.- Intentó sonar amenazante, pero cuando meneó sus manos en mi dirección hizo que yo soltara una carcajada.
-Claro, nena. Sabes que jamás te mentiría…te tengo demasiado miedo.
-Ja,ja y ja.-Se disgustó.- Dais asco. Pero bueno.- Sonreí. No me sentía mal por mentirle, porque no sabía muy bien lo que ese beso había significado. Si pasaba algo de verdad, se enteraría.
-Y tú, ¿qué?. ¿A qué hora habéis acabado?.
-Bueno, todos se fueron a las 8 y poco, pero Tom y yo seguimos en su apartamento. He llegado hace tres cuartos de hora a casa…- Volvió a taparse con el cojín.
-Así que tú y Tom, ¿eh? Ummm, interesante…-Asentí varias veces con la cabeza.
-Uff por favor, que es Tom.- Pude ver como sonreía exageradamente, por el hueco de cojín que dejaba para respirar.
-¡Oh Dios!. ¿Te lo has tirado?- Abrí la boca por completo.
-Shhh. ¡No! ¡Claro que no!- Se abalanzó contra mi y me tapó la boca con la mano. Me aparte de ella como pude.
-¡Ooooh! Pero te lo quieres tirar…-Ahora fui yo la que se tapó la boca, riéndome.
-No, no es eso. No tiene gracia si me lo tiro. Lo que mola es el tonteo.- Dijo frustrada, dejándose caer en el sofá. Negué alucinada con la cabeza.
-Uff, sois lo peor…- Ella se levantó y se dirigió hacia la puerta. Con la mano en la manilla, se giró.
-Y vosotros unos sosos de mierda.
-Bueno…lo que mola es el tonteo, ¿no?-le contesté con ironía. Enarcó las cejas y se marchó.


En el camerino, Rachel y yo esperamos para grabar. Ella estaba tumbada en el sillón, con los pies encima de mis rodillas. No paraba de bostezar, y cada vez que lo hacia unos lagrimones enormes caían por sus mejillas. Solté una carcajada.
-No te va a venir mal para el funeral.
-Susan me va a matar…-Se recostó hacia un lado, limpiándose las lagrimas.
-No te duermas, porque entonces sí que te va a matar. Pero en serio si no paras de llorar vas a ser una gran actriz, poco profesional, pero gran actriz.-Bostezó.- En cuanto salgamos vas directita a la cama.
-Tenemos cena en el O. En plan tranqui, porque no podemos ninguno con nuestra alma. Marion tenia que ir a trabajar a las 10…-Empezó a reírse, pero otro bostezo le interrumpió.-¡Joder que horror!. Vendrás a la cena,¿no?
-Supongo, sí. ¿Pizzas?-Asintió.
-Te paso a buscar a las 6 y media.- Cerró los ojos.
-De acuerdo. -Intenté espabilarla atacándola.-Y que ¿vas a “tontear” con Tom?.
-Ya vale con el temita, Yankee.- Me miró cabreada, pero luego sonrió.
-Te encanta.-Me reí.
-Ahhh.- Se estiró de los pelos. -No sé que me esta pasando. Toda la vida hemos hecho el tonto, con bailes, comentarios, miraditas…Pero es que últimamente es tan….sexual.- Me reí con ganas.
-¿Sexual? ¡Por dios!- Me pegó una patada en la boca- ¡Aaaauuu! Zorra.- Le baje las piernas de mí de un empujón. Se incorporó, y se sentó suspirando.
Alguien tocó la puerta.
-¡Estamos follando!.-Gritó Rach. Puse los ojos en blanco.
La puerta se abrió y Jack asomó su cabeza. Su cara paso del asombro a la decepción en cuanto vio que era mentira. Luego sonrió. Esa sonrisa me mataba. Se la devolví, mientras Rachel le tiraba una botella de agua.
-Tenemos que rodar el último polvo.- Dijo evitándola.
-Umm y va a ser un polvo muy…sexual, ¿no?- Noté un codazo en el costado.
-No, es en plan empalagoso.-Contestó confuso, mirándonos con los ojos entrecerrados. Se acercó a mí y me levantó.- Venga, que no puedo esperar a verte desnuda.- Puso voz sensual, pero al segundo estaba rojo como un tomate. Le sonreí con ganas, era tan mono.
Cuando estábamos en la puerta, me volví hacia Rachel e hice como que gemía vocalizando Tom. Empezó a descojonarse y Jack se volvió, observando todo el espectáculo. Paré y le miré torciendo la boca.
-Hey Jack.- le saludé con la cabeza, intentando aguantarme la risa. El pasó su mirada de mí a Rachel, de Rachel a mí. Asustado.
-Estáis fatal.- Le saqué del camerino, agarrándolo de los brazos.- ¿De qué iba eso?- Le ignoré.- ¿Estabas gimiendo?.

Me quité toda la ropa, menos las bragas. Jack estaba sentado en una cama en calzoncillos, de espaldas a mí. Le miré. Apreciando su espalda, aunque era pequeño, era musculoso. Observé detenidamente sus tatuajes. Siempre me habían gustado los tíos tatuados. Me tumbé en la cama y me tapé con la sabana.
-¿Ya?- preguntó Jack impaciente, al sentirme, pero sin volverse todavía.
-Sí.- Se dio la vuelta y me sonrió, metiéndose también bajo la sabana. Se colocó de lado, mirándome, con su cuerpo apoyado en uno de sus brazos, marcando bíceps y tatuajes. Los toqué. Dos mascaras y JACK THE LAD- Son un poco grandes, ¿no?
-Me gustan grandes, ¿a ti no?- Seguía clavando sus ojos en los míos, con una tímida sonrisa. Le miré detenidamente, pensando en su pregunta. Elevé las cejas y torcí la boca.
-¿De qué estamos hablando?- Soltó una carcajada.
-Pervertida.-Negó con la cabeza.- No creo que una pareja que vaya follar por última vez se tape. Esto es muy poco realista. Deberíamos hacerlo más convincente.- Abrí la boca.
-¿Sí, no? ¿Por qué no lo hacemos de verdad?, ya que nos ponemos.
-Buena idea.-Me reí alucinada.
-Ellos no saben que va a ser la última vez. Pervertido.- Metió su brazo por debajo de la sabana, y noté como su mano se apoyaba en mi cintura. Subiendo poco a poco- Jack.- Le advertí.- El sonrió sonrojándose. Y empezó a hacerme cosquillas.- ¡No! ¡Jack! ¡Para!- Me retorcí en la cama violentamente.- ¡JACK! En serio, ¡PARA!
-Chicos, ya vale. ¡Por dios!. Intento concentrarme, no chilléis.- Jack paró al oír la voz de Susan, quien estaba discutiendo algo con su ayudante, y sacó su mano, avergonzándose.
-Mira lo que has hecho. Además estoy llorando, capullo. Ahora van a tener que retocarme el maquillaje.
-No necesitas ningún retoque, estás perfecta.-Mirándole, sonreí. El enarcó las cejas.- Aunque mucho mejor sin sabana.- Seguimos riendo.
-¿Mañana tienes planes?-Preguntó tímidamente.-Negué con la cabeza.- ¿Y te apetecería cenar conmigo?. Mis amigos tienen ganas de conocerte.
-¡Claro!. Jack, me encantaría. ¿Me presentaras a tus amigos?.- Estaba realmente emocionada.
-Sí, saldremos con ellos, si quieres, claro.-Me miró nervioso.
-Por supuesto, cielo. Sería genial.- Se le iluminó la cara.
Se tumbó en la cama apoyando su cabeza al lado de la mía, en la almohada.
-Genial, sí.-Murmuró.


Salímos muy pronto. El rodaje estaba prácticamente terminado, ahora sólo estábamos regrabando algunas escenas, o puliendo el material, perfeccionando el sonido. Estaba deseando acabarla, y ver el resultado, pero eso suponía que los demás también la vieran. Que fuera real. En el fondo quería que fracasáramos y que el menor número de gente posible la viese, pero al pensar en todo el trabajo y esfuerzo de cada una de las personas que estaba participando en ella, en la ilusión de todos, me entristecía, y deseaba que triunfáramos en el festival. No por mí, ni para mí, si no por ellos.
Me tumbé en mi cama, suspirando. Pasé mi mano por la frente, y me recosté. Entonces, me vinó a la mente Robert. Su sonrisa. Sus ojos. Su voz. Y el beso de anoche. Y se me hizo un nudo en el estómago. No podía evitar pensar que a lo mejor le gustaba. Sabía que era imposible.
Cada vez que me miraba en el espejo, recordaba porqué jamás alguien como él se fijaría en mí, era de lo más normal. Pero me había besado una vez. ¡Y que beso!, y me había intentado besar en otra ocasión, pero iba pedo.
Sólo quería echar un polvo. Bueno pero era Robert Pattinson, podía tener a cualquiera mucho mejor que yo para ese propósito. Igual me había elegido a mí porque yo no iba a contar nada. Jamás diría: “Yo me acosté con Robert Pattinson”. Pero eso él no lo sabía. Aunque igual, después de tantas y tantas tías que habían pasado por sus manos, tenia un radar detecta “sumisas”.
Sin embargo, luego pensaba en las palabras de Rachel. Ella jamás me elegiría a mí como la victima de unos juegos sexuales, aunque fuera para uno de sus mejores amigos. Ella me quería. De eso estaba segura. Lo que decía iba en serio. Podían ser paranoias suyas, y lo eran, pero podía ser verdad lo de que no va tirándose a cualquiera.
Ella dijo que no iba BESANDO a cualquiera.
Sí, puede que no las bese, sólo es sexo.
Pero a mí me había BESADO, o sea que no era cualquiera.
-¡Dios, me estoy volviendo loca!.- Me senté y coloqué mis manos en las sienes.
Si no lo estas ya.
Era una locura seguir dándole vueltas a eso. Me levanté y puse música. Sonó Use me.
Pero no podía evitarlo.
¿Iría él a cenar?. Sí, probablemente. ¿Quería verlo? Sí, por supuesto.

Use me
I'm beautiful
Take me
I'm yours
Hurt me
It feels like medicine
And all I deserve

¿Y qué más da si sólo quería echar un polvo? Lo quería echar conmigo, ¿no?. Eso era más de lo que podía soñar. Me conformaba con estar a su lado, aunque sólo me quisiera para cortarle las uñas de los pies.
Sí, estaba absolutamente loca por él. Cuando le conocí mis sospechas sólo se confirmaron. Si después de tener sexo con él, ya ni me miraba, yo moriría. Pero también lo haría si él intentaba follarme y yo me negaba.
Pero yo valía más que eso, ¿no?

Your arms look so powerful
When they hold me down

Uff, yo no valia una mierda. Recordé sus brazos, fuertes a mi alrededor, subiendo por mis espalda....Noté como mi temperatura corporal subía peligrosamente.
¿Por qué coño estaba planteándome siquiera que Robert Oh Rob Mío Pattinson quería echar un polvo conmigo?.
Sacudí la cabeza. E intenté concentrarme en otra cosa. Abrí el armario y me perdí eligiendo algo que ponerme.

Use me
I'm beautiful
Take me
I'm yours

Me volví hacia el reproductor.
-Shirley guarrilla, no me digas esas cosas.


Terminamos de cenar enseguida. Todos estaban reventados. Apenas habían dicho nada, sólo comían y bebían. Robert y yo habíamos intentado animar el ambiente diciendo tonterías, pero el éxito obtenido brilló por su ausencia. Y que los demás parecieran cadáveres en vez de personas, había provocado que la única interacción posible en la mesa fuera la nuestra. El se había mostrado tan natural como siempre, y yo había intentado olvidarme de los conflictos, absurdos e insanos, de mi interior.
-En serio, chicos, yo no puedo más.- Rachel retiró una caja de pizza de enfrente suya y apoyó la cabeza en la mesa.
-Ni yo. Deberíamos irnos.- Marion colocó su cabeza en el hombro de Taylor.
-Pues yo no tengo sueño.-Tom recibió un codazo de Rach.
-Claro que tienes sueño. ¡Por dios!, si te has dormido a las 11 de la mañana.
-Sí, pero he dormido toda la tarde.-Ella puso los ojos en blanco, y se levantó.
-Yo abandono por hoy.
Todos la siguieron. Yo también me puse en pie. Y ayudé a recoger las cajas de pizza vacías.
Cuando estábamos en la puerta, Rachel se volvió con las manos en la cabeza.
-¡Joder!. Me he dejado la chaqueta en el armario de los platos de abajo. C, nena baja a por ella que estoy agotada.- Me puso morritos.
- Pero si yo no se cual es ese armario.
-Rob acompáñala, anda.- También le puso morritos.
-Pero, ¿qué coño has hecho tú en el armario de los platos?- pregunto él confuso.
-Pues he subido platos, aunque seáis unos cerros y no los hayáis utilizado.
-Pues, que vaya Robert solo.
-No, acompáñalo que no va a saber que chaqueta es.- Me empujó hacia a dentro apurada.
-¿Hay más de una?
-Sí, hay un montón. Venga, por favor.
El puso los ojos en blanco, y se adentró en el local de nuevo. Yo suspiré y le seguí.
En el sótano, encima de un armario estaba la chaqueta, junto a un montón de trapos viejos.
-Joder, ¿Cómo no la voy a reconocer entre tanta mierda?. Hasta ahí me da.-Protestó Robert cogiéndola. Yo me reí. Conociendo su estilo, lo dudaba.
Subimos y al salir nos dimos cuenta de que no estaban.
-¡Dios! Y aun encima no nos esperan.
-¡Que tíos!-Rob, se agacho y paso sus manos por el pelo, con cara de indignación.
Cogí el móvil y llamé a Rachel. Pero ella no contestó. Volví a intentarlo, pero tampoco obtuve respuesta.
Abrí la boca anonadada.
-Dime que no ha montado todo esto para dejarnos solos.- Me volví hacia él flipando.
-Me temo que sí.- El seguía con las manos en su pelo y la mandíbula desencajada, tan perplejo como yo.- Esta es idiota, y ¡Tom!. La madre que los parió a los dos. Joder que poca sutileza…-Suspiró.
-Y con nocturnidad y alevosía .- Soltó una carcajada.
De repente pasó un taxi y él lo paró.
-Creo que deberíamos coger uno cuanto antes. No es buena idea que yo ande en una calle durante mucho rato, montándome en un coche con una tía…
-Oh, claro.
Me metí en el taxi, y él me siguió.
Seguimos riéndonos de lo que acababa de pasar, sin poder acabárnoslo de creer.
-Joder esto de ser los únicos en no trasnochar es una mierda. Me hubiese tomado un par de cervezas más, encantado.- Puso los ojos en blanco y se paso la mano derecha por el pelo.- A veces es verdad que hablo como un alcohólico, ¿no?
-Que va…sólo como cualquier inglés…o español. Europeo en general.- Se rió.
-Yo es que cuando empiezo, no sé parar. ¿Es un problema?- Se puso serio. Me encogí de hombros.
-A mí también me suele pasar…-Sonrió.
-Eso me tranquiliza…- Ambos nos reímos.
No sé que pensé en ese intenté, pero no creo que mis conexiones neuronales funcionaran correctamente cuando solté:
-Hey, podemos seguir en mi casa. Sandra no está. Y tengo cerveza a patadas en la nevera, puede que comida no, pero cerveza seguro.
-¡Claro!...digo, claro, si lo dices en serio.- Se acarició el cabello, inquieto.
-Sí, te juro por dios que tengo cerveza.-Volvió a sonreír.
-Qué si de verdad no te importa que suba.- Lo pensé un poco.
-Lo de que no te duchas es mentira, ¿no?.- Puso los ojos en blanco y se hizo el ofendido.
-Creía que habías dicho que harías como que no habías leído nada sobre mí.
-¡Eh!, que esa información no la he encontrado googleandote. Me la ha contado Rachel..- Soltó una carcajada.
-Me lo creo.- Siguió riéndose.
El taxi se detuvo, ya habíamos llegado. El pagó al taxista, y yo abrí la puerta. Al salir me volví hacia él.
-¿Vienes?
-¡Joder sí!, jamás diré que no a una cerveza gratis.
-Me halaga.-Contesté confusa.
El asintió y me regalo su sonrisa, de medio lado. Suspiré y me mordí el labio, mientras me dirigía hacia mi portal. El me paso su brazo izquierdo por el hombro y me siguió.


Neeeenas os voy a echar un monton de menos!! sniff sniff
(jajajaja parece que voy para un mes y solo voy a estar fuera dos dias...)

5 comentarios:

  1. joderrr nena y nos dejas así dos dias ???? jajaja ainnnsssss , nosotras tb. te vamos a echar de menos cariño, pasalo muy bien vale? y vuelve para terminar está maravillosa historia.
    Un besazoooooooo

    ResponderEliminar
  2. qiero máaaaaaaas!! aay tia que te veo el sábado! oleeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee

    ResponderEliminar
  3. O_O jodeeeeeeeeeeeeeeeeer nooooooooooooo!!!! :( quiero leer el polvazoooooooooooooooooo nena!!! o la borrachera que pillan o lo que sea!!!!

    Y estas tienen un morro....(como le sonsaqueis informacion del proximo cap me enfado,e??jajaja)

    Un mua nena y pasarlo genial!!!!

    ResponderEliminar
  4. no nos dejes asi aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
    aaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhh

    genial seve, sigue asi!!!

    ResponderEliminar
  5. No sé a dd te vas pero disfrútalo todo lo q puedas (y vuelve pronto jeje)

    ResponderEliminar